Para una agencia de comunicación es imprescindible tener buenas relaciones con medios. Es la forma de que las noticias acerca de las marcas que se representan tengan eco. Pero el entorno se está volviendo cada vez más complejo para los profesionales de la comunicación corporativa. La Encuesta de JOTW 2019 y el European Communication Monitor 2019 dan pistas sobre el presente y el futuro del sector y muestran algunas conclusiones interesantes.
De acuerdo con la mencionada Encuesta de Comunicaciones de JOTW de 2019, realizada este año a más de 200 profesionales de la comunicación, una mayoría (68%) considera que las relaciones con los medios son más difíciles que anteriormente. De esa cifra, un 15% las considera mucho más complicadas.
Algunas de las opiniones recogidas señalan como causa que «hay menos periodistas y llamar su atención es más difícil», que «los periodistas, como el resto, disponen cada vez de menos tiempo y recursos, a la vez que sus responsabilidades aumentan» y que «son bombardeados con e-mails que muchas veces no son de calidad, y parece que cada vez hay menos oportunidades de entablar relaciones reales con ellos». Por otro lado, menos comprensivo con los profesionales de la información, se señala que «los periodistas ya no son objetivos, y si no compartes su sesgos, no están interesados por tu historia y te dejan de lado». Además, «con tantas voces e influencers es difícil quiénes son medios y quiénes no». Los encuestados también señalaron como problema la creciente rotación de periodistas, siendo los más veteranos sustituidos por perfiles de menor experiencia que además permanecen poco tiempo en el puesto.
Lo que es incontestable es que hay menos opciones para recibir una cobertura espontánea por parte de los medios, además de muchos competidores con los que pelearse por esa atención. Asimismo, se ha convertido en todo un reto conseguir que las buenas ideas reciban el interés que se merecen. Por si fuera poco, vivimos tiempos en los que es muy fácil acabar siendo el foco de una polémica.
Todo esto hace necesario un replanteamiento del enfoque de la comunicación corporativa, que debe adaptarse a los cambios y salirse de la metodología más tradicional.
En la encuesta también se analizaron las tendencias que marcarán el futuro de la comunicación corporativa:
El papel de los influencers parece que no preocupa a los profesionales de comunicación corporativa, que consideran que su gestión corresponde al departamento de marketing. Aún así, los límites entre ambos departamentos cada vez se difuminan más, y el trabajo conjunto no solo es deseable, es ya una necesidad.
Todas esto son conclusiones extraídas de una encuesta a profesionales de EE.UU., aunque sirven para detectar tendencias que posiblemente se hagan globales.
Por otra parte, el European Communication Monitor 2019, que fue presentado en mayo en la European Communication Summit, recoge las opiniones de 2.689 profesionales de la comunicación de 46 países que trabajan en empresas, ONG, administración y agencias. En el análisis se contempla la confianza que se deposita en los profesionales de comunicación y relaciones públicas, los desafíos relacionados con la transparencia y la generación de esa confianza, la irrupción de la inteligencia artificial y la creación y distribución de contenido:
El ecosistema informativo es cada vez más complejo, más fragmentado, con fronteras cada vez más difusas entre contenidos, negocio y tecnología. Queda esperar a las tendencias en comunicación corporativa para 2020 para comprobar si estas pautas se afianzan.